Susana Ros, diputada nacional por el PSPV, se ha hecho eco del malestar de los ciudadanos discapacitados de la ciudad de Castellón y sus familiares ante el Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad por la nueva tasa para el transporte adaptado.
Pues, para Ros, «no se puede consentir que los usuarios deban pagar ahora por su condición física o psíquica cuando no tienen alternativa y hacen uso de este servicio de movilidad por necesidad».
Así, la diputada explicaba que «el ayuntamiento recaudará 19.000 euros a costa del bolsillo de 228 usuarios, de los que solamente dos personas tienen trabajo», apuntando que el pago de este servicio oscila entre los tres euros, por uso esporádico dentro del municipio; los 15 euros para algunos trayectos ocasionales, y hasta una cuota mensual de 60 euros.
«La discapacidad no puede ni debe ser un obstáculo para que se tenga una vida de calidad», concluyó Ros.
Fuente: lasprovincias.es
Desde Gestverd nos sumamos al malestar de los ciudadanos disCAPACITADOS de la ciudad de Castellón. Nos parece una broma de muy mal gusto que ayuntamiento quiera hacer «negocio» a costa de los usuarios con problemas de movilidad. La responsabilidad de la carencia de taxis, del sobreprecio de las carreras y de la falta de infraestructuras del transporte adaptado la están traspasando a los usuarios, cuando esta responsabilidad es enteramente del Ayuntamiento, por su mala gestión realizada en el pasado, en el desarrollo y difusión del transporte adaptado. Ahora la pagan los usuarios, una vergüenza.